Cabezal Oculus Rift
A diferencia de muchos de sus formas anteriores, el cabezal del Oculus Rift es un dispositivo ligero, cómodo y que se coloca sobre la cabeza de forma fácil y sencilla (con correas que se pueden apretar para un mejor ajuste).
Sigue manteniendo un diseño cuadrado y acartonado que recuerda un poco al de una caja de zapatos en la cara pero, una vez que te profundices en el dispositivo y en sus aventuras, no te darás ni cuenta.
Se ha acoplado espuma alrededor de la visera para evitar el roce o fricción, y hay un montón de espacio que los usuarios que tengan gafas puedan disfrutar del aparato sin ninguna molestia. Un dial en el propio dispositivo también puede ajustar las lentes del interior para asegurar que se obtiene la imagen lo más clara y nítida posible.
En comparación con los modelos de kits en desarrollo, el Oculus Rift es increíblemente cómodo. Incluso con dispositivos en versión Beta, ninguno se siente pesado o incómodo de llevar, de hecho la experiencia es tan increíble que olvidas que lo llevas puesto.
El único problema que se plantea, es la ligera tensión que surge en el ojo cuando llevas utilizando el aparato un largo tiempo, y se está trabajando en muchas tecnologías para contrarrestar el problema. (Por ejemplo, el desenfoque de movimiento y las vibraciones). En los primeros dispositivos, a menudo nos encontramos la experiencia discordante después de un período debido a que la resolución era pobre o las tasas de trama no iban del todo bien, sin embargo, el producto apto para consumidores de Oculus Rift, tiene dos pantallas OLED de 1080 x 1200 píxeles – una para cada ojo – funcionando a 90 Hz. Con ello se asegura la alta calidad, la acción suave, y lo más importante de todo; evitando la fatiga ocular o náuseas.
De hecho, la mejoría ha sido significativa dado que usuarios que experimentaron “fallos” en dispositivos anteriores están increíblemente satisfechos ahora con el Oculus Rift. (Incluso más contentos que con otros terminales de otras marcas).
Los primeros dispositivos también requiere el uso de auriculares de terceros para el audio, pero el Oculus Rift viene con un par de auriculares de sonido envolvente virtuales incorporados. Se colocan a ambos lados del dispositivo y se pueden ajustar a las orejas para un máximo confort. El Oculus también viene “lleno” de LEDs infrarrojos que trabajan con un sensor de control de movimiento.
Por último, el dispositivo está cableado. Por desgracia, un dispositivo de realidad virtual inalámbrico con la capacidad de Oculus Rift tiene un largo camino por delante. Puedes obtener dispositivos inalámbricos que son impulsados por y para los teléfonos móviles, como Google CardBoard y el Samsung Gear VR – también fabricad por Oculus – pero para obtener la experiencia de realidad virtual completa, realmente se necesita estar conectado a un PC, y por ende, la necesidad de los cables.
Controladores de Oculus Rift
Al igual que HTC Vive, Oculus será la introducción de los controladores de movimiento en el futuro. Pero se dice que los terminales vendrán con un mando de Xbox One.
En términos de juego, el controlador de Xbox One es uno de los mejores. Es cómodo y resistente a la mano, mientras que los botones y los joysticks están en una posición natural y fácil de encontrar. Eso es esencial, dado que no creo que te haga mucha gracia tener que estar mirando todo el rato para encontrar los botones correctos mientras te están acribillando a balazos.
Oculus también afirma que la mayoría de los juegos que se están desarrollando para el Rift se están haciendo también con el mando de Xbox One en mente.
Los controladores táctiles Oculus (Oculus Touch), en realidad son más avanzados que los de HTC Vive y podría ser un elemento de cambio. Literalmente.
Éstos se envuelven alrededor de cada mano y ofrecen disparadores y un joystick para la interacción, pero donde mayor es la novedad en este dispositivo es que existe una cantidad de controladores para diferentes conjuntos de los dedos. El dedo índice, por ejemplo, tiene que realizar un seguimiento de forma independiente a los otros tres dedos en cada mano. El pulgar también tiene su propio sensor.Esto permite que los controladores táctiles traten de imitar con precisión sus propias manos, proporcionando un control preciso sobre las acciones de agarre – incluso se puede dar un pulgar hacia arriba (como gesto, claro).
El único inconveniente que podemos ver en la actualidad es que cada vez que se utilizan los controladores Oculus Touch, han tenido que ser instalados en las manos por un asistente después de que el dispositivo ya haya sido puesto (no puedes ponértelos una vez tengas puesto el dispositivo).
Para otras funciones como las de navegación y de vídeo, un mando a distancia inalámbrico incluido, con botones simples para los controles de hogar, de vuelta, seleccione y volumen, ayudará a navegar sin tener que sostener un gamepad.
Sensores de Oculus Rift
La última pieza del kit que viene con el Oculus Rift es un sensor de movimiento para el sistema de seguimiento de posición de la compañía “Constellation“.
Se ve un poco como si fuese una cámara de vigilancia, con un pequeño monte que se puede colocar sobre una mesa o un estante enfrente tuya. También se puede atornillar en un trípode, si no dispones de una buena posición en otro lugar.
Como se mencionó anteriormente, el dispositivo se cubre con LEDs de infrarrojos, que el sensor recoge con el fin de realizar un seguimiento de posicionamiento de la cabeza. Otros sensores también se pueden añadir en un futuro para un seguimiento más preciso, aunque si adquiere los controladores más tarde, es posible que tenga un seguimiento mejor.
Hay otros sensores en el interior del auricular en sí – un magnetómetro, un giroscopio y un acelerómetro -. El resultado final, una experiencia suave, que no tiene lag y permite respuestas rápidas y precisas a cada movimiento del usuario.